Se guardan los milenios dentro de otros milenios. Ante eso las horas son pequeños, muy pequeños insectos. Acaso así, nosotros, tan nodos imperfectos nos pensamos que siendo podremos dejar algo. Pero nada es el tiempo La imagen siempre muere, pero no así el espejo, que perdura y perdura de milenio en milenio. Quien sabe si seámos realidad, muerte o sueño. L.
No hay comentarios:
Publicar un comentario